Con la compra de Motorola el año pasado, Google no sólo se quedó con muchas patentes de telefonía móvil y una empresa que fabrica smartphones, sino que de paso consiguió plantas de fabricación de set-top boxes, las cajas que usan las empresas de TV cable para entregar sus contenidos en los hogares.
Mientras algunos especularon que la empresa podría usar esta parte de Motorola para impulsar a Google TV, la compañía de Mountain View no está interesada en eso, y rematará a esta división en los próximos días. Se espera que las ofertas estén entre los USD$1.500 millones y USD$2.500 millones, hechas por una variedad de compañías, entre las que se encontrarían Technicolor, Arris y Pace.
Según el Wall Street Journal, Google podría quedarse con parte de la propiedad intelectual que tiene Motorola en esta área, y simplemente vender la unidad de distribución de hardware, lo que podría hacer al negocio todavía más rentable.
La opción de vender se explicaría por la resistencia de los operadores de cable a adoptar una plataforma abierta como Google TV en su oferta, donde no tendrían el control. También cabe considerar que muchas de estas cajas están siendo reemplazadas por consolas de videojuegos como el centro multimedia del hogar. El futuro de Google TV está bien borroso considerando estos factores, pero quién sabe, quizás están planeando algo en secreto para sacarlo adelante.
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